Que aunque sé que me diste la opción de decidir, yo decidí seguirte y que mi vida sea según tu voluntad.
Que confío plenamente en ti, en que todas las cosas tanto buenas y malas tiene un propósito y que no debo dudar ni temer, porque no me pondrás pruebas mas grandes de las que pueda soportar; porque sé que en cada segundo de mi vida tu estás conmigo tomando mi mano.
Que sabes que mi corazón se llena de alegría cada vez que hago lo que tu quieres, porque no lo veo como un acto de obediencia sino de gozo.
Sé que tus planes son y serán mucho mas grandes y gratificantes que los míos, que nadie mas que tu quieres que yo viva de acuerdo a tus mandamientos, que nadie mas que yo te agradece por eso padre mío, por amarme de esa manera.